viernes, 18 de noviembre de 2011

A concienciarse

Después de un mes fuera de juego, hoy, que por fin siento que tengo un minuto para transcribir las fugacidades que pasan por mi cabeza entre carrera y carrera diarias, me he parado aquí delante (que ya era hora) a valorar el grado de confusión de mis pensamientos.

"Ay, qué estrés, no sé a quién votar" Y probablemente si me dieran los seis meses más que nuestros amigos los titiriteros han decidido arrebatarnos como si fuéramos marionetas tampoco sabría. Tampoco es que me haya importado mucho la política en lo que lleva recorrido mi corta vida, porque al final todo se corrompe. Pero si miro para atrás, serán los extremos a los que hemos llegado, el movimiento 15M o que tengo amigos muy políticamente inquietos y sabios, creo que estoy concienciada como no lo había estado nunca de lo importante que es que vaya a las urnas el domingo.

Dejando a un lado mi natural escepticismo sé que probablemente el lunes será otro día más. ¿Qué está todo el pescado vendido? Quizás. ¿Pero por qué? El asunto tiene más chicha de lo que pensamos, aunque es mucho más simple que cualquier discursito político, y es eso precisamente en lo que deberíamos pararnos todos a pensar. Unos castigan a otros, otros castigan a unos. Cada uno a un lado del campo, y los recogepelotas alrededor. "¿Para qué vamos a ascender a los recogepelotas si son unos don nadies y no saben jugar?" "Dejémosles que así están bien. Aunque el número 1 ya no nos gusta, no apuesto ni un euro por él,  además, ya sabemos quien va a ganar el próximo set." "¿Y acaso les hemos dado una oportunidad a los recogepelotas para que demuestren como juegan?" "Nada nada, el número 1 ha sido una decepción, a castigarle" "¿Pero te has parado a pensar qué hubiera hecho el 2 si le hubiera tocado jugar esos partidos?"...

En definitiva, el bueno, el malo y los chivos expiatorios por los que nadie da un duro... ¿Quién dijo que tres son multitud?

Lo que hay que definir es el papel del árbitro, que no hay que olvidar quién es, quiénes somos. No hay que ser un resabido de la política para ejercer el voto con corrección. Hay que tener claro lo que se quiere, lo que gusta y lo que disgusta. No existe el jugador perfecto, como no existe el partido perfecto... pero hoy me ha dicho alguien que elija "al que más me guste y menor mal piense que puede hacer"... He de decir que aún no sé quién es, pero mañana tomaré una decisión. Y probablemente el lunes todo siga igual, será un día nublado de invierno, muy nublado. Hablarán de nosotros en Europa... ¿augurarán un cambio? Claro, desde arriba y desde lejos todo se ve más sencillo, y Roma no se construyó en un día, aunque de todas formas, quizás no sea el mejor ejemplo con el que compararse ahora mismo.

Una cosa más, ¿quién dijo que tres son multitud?

Sólo espero que pase lo que pase el domingo se acabe lo de andar señalando con el dedo y alguien se ponga manos a la obra para que dejen de llamarnos CERDOS, algo de lo que por cierto, no tiene la culpa "el sistema agrícola nacional" sino unos cuantos granjeros muy cosmopolitas que parece que no saben o no quieren saber que los recursos no son ilimitados, se van agotando, hasta que quedan las sobras...


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