domingo, 15 de enero de 2012

Efecto dominó

Salgo de la habitación a por una botella de agua. En el salón mis padres juegan al mus con unos amigos, ahí llevan toda la tarde. Cuando vuelvo a salir, me parece entender a mi madre - copa de vino en mano - no se qué de la residencia. Al cabo de un rato los amigos se van y mi madre sigue al teléfono... Oigo algo de una ambulancia.

Quiero ir a preguntar, pero no sé si es buena idea. Finalmente, me dice que su tía tiene neumonía y se la están llevando al hospital. Pienso en mi abuela, cuidando del pequeño de cuatro hermanos, su marido, en cómo cuidó al mayor y en cómo se ocupa de los dos medianos, como puede. Residencias, ambulancias y sillas de ruedas... y ella ni utiliza bastón. Poco a poco van cayendo a su alrededor, es el efecto dominó de la vida... y me pregunto qué se le estará pasando a ella, la última pieza, por la cabeza.


jueves, 5 de enero de 2012

Feliz hipocresía


Felices fiestas. Feliz navidad. Feliz año. Felices reyes. Todo son comilonas, fiestas y regalos. Y que se pare el mundo porque cambiamos de año. Los comercios cierran antes para que todo el mundo pueda ir a sus casas a preparar el cenorrio del día 31 y oh, grandes trabajadores españoles, la jornada laboral se reduce unas horas (que pena que no puedan ser más porque las fiestas hayan caído en fin de semana) y los afortunados reciben un par de días libres para poder ir a casa. Nada nada, a olvidarse de hacer vida normal del 23 de diciembre al 6 de enero. Ni los históricos monasterios de importantes pueblos pueden visitarse porque han cogido vacaciones como los escolares. Atiborrémonos mientras podamos. El pavo en navidad, el cordero en nochevieja y el roscón en reyes.

Y mientras cambia el gobierno-así es menos duro-, se proponen los recortes, las subidas de impuestos y el paro aumenta.

Pero oye, la Gran Vía intransitable, las colas de las tiendas quilométricas y los restaurantes a rebosar. Eso sí, las luces de Madrid este año brillan por su ausencia.

Ah, y grandes fechas estas para pasar con la familia, “porque claro, es que es imposible juntarnos todos en otro momento…”

Como molan las navidades…  (Pero, ¿Qué narices pasa en este país?)